Posted by ~ SeRGio ~

Pasaron los días y nosotros seguíamos haciendo nuestra pequeña vida social sin ni siquiera movernos, ya no contamos con ningún transporte por lo que nuestro desplazamiento casi nulo. Pocos días después algo sentimos bajo nuestros pies, fue cuestión de segundos pero el susto fue considerable. Durante esa noche no conseguimos pegar ojo, ni siquiera mi amigo que había estado en Dinamarca sabía de que se trataba. A los dos días el suceso se repitió, pero creo recordar que era más fuerte, con el paso de los días nos fue pareciendo algo rutinario y ya apenas le prestábamos atención.

Una noche el cielo se iluminó produciendo unas luces tenebrosas acompañadas de unos ruidos ensordecedores; mi amiguito creo que los llamó truenos y relámpagos. Fue en el amanecer cuando todo relativamente se había calmado, la calma ya parecía flotar entre nosotros cuando el suelo volvió a temblar. La sacudida en comparación con las anteriores fue más fuerte, el suelo temblaba cada vez más y más. El terreno que antes parecía duro, empezaba a resquebrajarse, no sabía lo que pasaba pero la cara de mi amigo mostraba pánico por lo que entendí que no era algo habitual y supe que estábamos en peligro.

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